
En las oportunidades en las que por motivo de trabajo o placer viajamos en avión a otra ciudad, nos encontramos con el doble inconveniente de no disponer de nuestro propio vehículo, ni conocer el lugar. Existen variadas opciones pero, sin duda, la más conveniente es un traslado aeropuerto Madrid.
Este es un servicio que provee de coches, en excelentes condiciones y de choferes con uniforme. Los mismos han sido formados y tienen toda la experiencia realizando esta actividad, conocen el automóvil, se encuentran familiarizados con la zona y saben tratar a los pasajeros con educación y respeto. Asimismo, están preparados para ir por las rutas más rápidas y qué acciones emprender en caso de que se presente cualquier imprevisto.
¿Cómo funciona un servicio de traslado al/desde aeropuerto de Madrid?
En general, el día anterior al viaje la empresa nos comunica el número telefónico del chofer asignado, así podremos avisarle de presentarse un cambio de itinerario. Dado que la persona sabe a qué hora aterrizamos estará esperándonos cuando desembarquemos, con un cártel con nuestro nombre impreso. Por lo que no se pierde tiempo tratando de encontrarlo.
A partir de ese momento se hará cargo de nosotros y del equipaje, trasladándonos con comodidad y seguridad a donde sea que debamos o queramos dirigirnos. Algunas consideraciones especiales serían: de viajar con niños pequeños el vehículo tendrá asientos adecuados para ellos; si se trata de un grupo familiar o de trabajo, entonces en vez de uno de turismo, nos suministran una van o un minibús con la capacidad requerida.
El hecho es que, independientemente de la razón por la que nos desplazamos a Madrid podremos movilizarnos desde y hacia el aeropuerto, y dentro del área todos los días que estemos allí, sin desperdicio de tiempo ni posibilidad de desorientarnos en la capital. Además, no requerimos llamar un taxi cada vez que se pretenda salir, ni localizar estacionamientos, que sería el caso sí rentáramos un coche.
Las ventajas de este tipo de servicio son múltiples. Y mientras el conductor nos transporta a destino previsto con eficiencia, nosotros pudiéramos estar leyendo el diario, viendo una película, planificando una reunión, hablando por teléfono o con nuestros compañeros, si vamos en su compañía, o, simplemente, descansando.