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1.- Quita las alfombras y cambia las fibras sintéticas por vegetales.
Cuando llega el verano es conveniente retirar todas las alfombras que tengas en el suelo. No solo por una cuestión estética y de limpieza sino porque te ayudarán a refrescar el ambiente.
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2.- Quita las cortinas y deja solo los visillos.
Retirar la caída de las cortinas y dejar solo los visillos en las ventanas es fundamental, según explica la experta en decoración Doris Soros, responsable de Decoration-Line. Si tus visillos son oscuros cámbialos por unos blancos.
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3.-Utiliza estores enrollables.
Usa estores enrollables, también conocidos como estores screen. Puedes encontrarlos de diferentes tejidos y colores. Permiten la entrada de la luz y limitan el paso de los rayos ultravioleta.
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4.- Coloca fundas de algodón o lino en los sofás.
Cubre los sofás y sillones de tu casa con fundas de algodón o de lino, preferiblemente en un tono claro. Los colores blancos y beige permiten reflejar el calor.
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5.- Reduce el uso de los electrodomésticos.
Los electrodomésticos se calientan durante su uso, lo cual puede acabar afectando al ambiente de tu casa. Utilízalos lo menos posible durante el verano.
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6.- Coloca un toldo en la terraza.
Si tienes una terraza en casa, coloca un toldo en la puertas de salida. También puedes poner una pérgola, que dejará pasar el aire y creará más corriente.
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7.- Utiliza ventiladores de pie, mesa o de techo.
Los ventiladores corrientes te ayudarán a reducir la sensación de calor. Puedes usar un ventilador de pie o de mesa según tus necesidades. Los de techo, típicos de zonas tropicales, son los más competentes frente al aire acondicionado. Doris Soto recuerda que estos aparatos son muy efectivos siempre que la temperatura de la estancia no sea superior a tu temperatura corporal.
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8.- Mejora el aislamiento de las ventanas.
Si quieres mantener fresca la casa a largo plazo y tienes presupuesto suficiente, intenta mejorar el aislamiento de las ventanas. Esto es clave para conseguir que la temperatura interior sea la correcta en cada época del año.
Si vives en una vivienda unifamiliar o en un ático podrías necesitar mejorar el aislamiento del tejado, lo cual implica mayores costes.
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9I.- nstala contraventanas.
Otra de las cosas que puedes hacer, pero que implican algo más de coste, es instalar contraventanas con lamas regulables. Este tipo de contraventana te permite regular la entrada de la luz y frenar la entrada de aire.
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10.- Planta enredaderas en la fachada.
Una opción tradicional y muy efectiva es plantar enredaderas y distribuir las ramas por la fachada de la casa. Si vives en un piso puedes hacerlo en la terraza. Según la decoradora Doris Ruano, «la capa de aire que se crea entre la vegetación y el muro amortigua el calor en el interior».
